Todos asociamos Halloween con las típicas calabazas iluminadas, pero ¿sabías que en su origen se utilizaban nabos? Quizás también creas que nació en Estados Unidos por las películas de cine, sin embargo sus inicios son celtas. De Irlanda más concretamente. Ahora muchos países la han agendado en su calendario de celebraciones, y sobre todo los jóvenes la viven con especial intensidad. Sin embargo, cada fiesta de Halloween en el extranjero tiene sus matices.

Hoy te quiero contar cómo de especial es la fiesta de Halloween en Irlanda, Reino Unido y Canadá, por destacar algunos de los destinos de nuestros programas académicos. Descubrirás qué se suele hacer en la noche del 31 de octubre y lo bien que te lo podrías pasar en condiciones normales (sin COVID 19 de por medio) si decides hacer un curso escolar, un trimestre académico o una experiencia familiar con una familia de acogida en cada uno de esos países con Native English Experiences.

Recuerda que si te vas, por ejemplo a Canadá a hacer el año académico o el primer semestre en uno de los programas de Native English Experiences, podrás quedarte con tu familia anfitriona para celebrar, además de Halloween, el Thanksgiving (Día de Acción de Gracias) y la Navidad. Aunque también tienes la posibilidad de volver a casa en vacaciones. Eso como tú decidas.

La fiesta de Halloween más auténtica es en Irlanda

Los antiguos celtas creían que en la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre los espíritus regresaban a la tierra en busca de algún cuerpo que ocupar. Para zafarse de ellos y ahuyentarlos, encendían hogueras y se disfrazaban con trajes y máscaras terroríficos.

Este ritual coincidía en Irlanda con el Samhain, en que se festejaba el final de la época de cosechas y el comienzo del invierno en un día en el que los límites entre el mundo de los vivos y el de los muertos desaparecían. En aquel momento se empezaron a utilizar nabos ahuecados e iluminados que se colgaban en las ventanas de las casas para ahuyentar a los fantasmas.

Más tarde, el Cristianismo incorporó su propio homenaje a los fallecidos en el Día de Difuntos. Y ya en el siglo XVIII los irlandeses llevaron la celebración a Norteamérica, donde se transformó en la fiesta de Halloween (cuyo nombre procede de la contracción inglesa de ‘All Hallow Eve’, que significa ‘Día Anterior a los Santos’) al mezclarse con otras tradiciones locales, y a falta de nabos emplearon calabazas con la misma función.

Hoy en día los irlandeses celebran Halloween a lo grande. De hecho, durante la semana anterior a esa fecha se realizan diferentes eventos, como desfiles, hogueras, cabalgatas, concursos de disfraces…

Además se preparan platos y bebidas especiales, como el Barm Brack, un dulce que esconde un anillo (que presagia boda para quien le toque) y un penique (que augura buena fortuna), y el Lamb’s woos, una bebida hecha con manzanas asadas, leche y cerveza. Por cierto, si te apetece conocer más datos sobre las costumbres que tienen los irlandeses de celebrar Halloween, no dejes de visitar la página oficial de turismo de Irlanda. 

En Inglaterra, calabazas y el famoso ‘trick or treat’

En Inglaterra también usan calabazas que vigilan puertas y ventanas. Ahí relucen con su sonrisa tétrica a la espera de que los más pequeños aparezcan cantando el clásico trick or treat (truco o trato), y se ganen regalos y caramelos haciendo diferentes juegos.

Durante ese día es tradición comer platos que simulan ser pócimas de brujas, ojos, esqueletos… y es típico el pan de calabaza. También niños y adultos hacen juegos como el de la manzana. Llenan un barreño con agua, echan unas cuantas manzanas y, con las manos atadas y los ojos vendados, los participantes tienen que atrapar con los dientes tantas manzanas como puedan. ¡De lo más divertido!

En Canadá, cementerios a escala y causas benéficas

En Canadá, la fiesta de Halloween es la segunda más popular, al menos comercialmente hablando, después de Navidad. Si bien allí el 31 es laborable (se trabaja y los colegios funcionan), la gente vive ese día con mucha emoción.

Gastan mucho dinero en disfraces, dulces y en la decoración de sus casas y jardines. Hasta tal punto lo viven que llegan a recrear cementerios o mazmorras en las casas para invitar después a los amigos o compañeros de trabajo a que las vean y celebrar con esa excusa una fiesta privada.

Sin embargo, hay un detalle que hace muy peculiar la fiesta de Halloween en Canadá: los niños no siempre piden caramelos. Muchas veces van de casa en casa con una hucha con el fin de recaudar dinero para alguna causa benéfica. Y otra particularidad: ese día se bebe cerveza de Halloween, hecha con calabaza.

Ya ves que aunque sea la misma fiesta de Halloween en el extranjero, en cada parte del mundo se celebra de una forma singular. No dejes pasar la oportunidad de vivirla en primera persona en alguno de estos destinos gracias a los programas académicos que te ofrezco desde Native English Experiences.